Caminando a la felicidad

Enseñanzas de Su Santidad Sakya Trizin (2ª parte)


 


En 2016 tuve la extraordinaria fortuna de poder asistir a otras sesiones de enseñanzas de su 41ª Santidad Sakya Trikin Ngawang Kunga y me gustaría compartir contigo las notas que tomé en su día:

"Como seres humanos tenemos muchos requisitos que cumplir: alimentos, ropa y espiritualidad. Ésta es la más importante porque nos aporta coraje.

Todos queremos estar libres de sufrimiento y conseguir la felicidad.

Conseguimos alivio temporal, pero la felicidad real no se encuentra en el mundo material.

Sólo se consigue calmando la mente. Tenemos que controlar las emociones negativas mediante la práctica espiritual.

Todos tenemos la Naturaleza de Buda, esencia que no está manchada de emociones negativas. La mente real es pura.

Nosotros giramos y giramos en una rueda, la rueda del Karma, en el samsara, sufriendo y sufriendo porque nos dejamos llevar.

Buda es aquel o aquella que se ha liberado de todos los oscurecimientos y se ha Iluminado, pero en la esencia no hay diferencia entre Buda y cualquier ser.

Todos podemos ser Buda, sólo hay que encontrar el método correcto.

Samsara (ciclo de nacimiento, vida, muerte y reencarnación) se divide en Seis Reinos, tres superiores y tres inferiores.

Los tres Reinos Inferiores son: los seres infernales, los espíritus hambrientos y los animales.

No percibimos a los seres infernales y a los espíritus hambrientos los conocemos por los Sutras.

El sufrimiento de los animales los vemos. Ellos tienen Naturaleza de Buda, pero no pueden comprender los procesos para salir del samsara.

Los tres Reinos Superiores son: los humanos, los semidioses y los dioses.

Los dioses y los semidioses tampoco los vemos. Conocemos su sufrimiento por las Verdades Supremas.

Los sufrimientos de los humanos son principalmente cuatro: nacimiento, enfermedad, vejez y muerte.

Pobreza, problemas mentales, separación de familiares, soledad, etc. son otros sufrimientos de los humanos.

La ciencia y la tecnología han traído muchos beneficios, mucho progreso, pero también hemos conseguido progresar negativamente en desarrollo de armas, por ejemplo.

Poca gente hace acciones virtuosas en sus tres fases: preeliminar, principal y conclusión. Es muy difícil que una persona lleve una moral virtuosa completa.

 Antes de la práctica espiritual hay que ser una buena persona: alguien que se hace feliz asimismo y a los demás.

Tenemos que buscar atender las necesidades de los demás y no sólo las nuestras.

Un egoísta no puede llegar a ser feliz.

Hay dos Impermanencias, la contínua y otra más sutil que es momentánea.

El cambio sutil se produce en cada instante, en cada momento las células nacen y mueren.

Las cosas compuestas tienen cuatro finales, todo lo que se reune se termina separando. También lo que se acumula se termina agotando (la riqueza) y todo lo que sube, baja: el poder, la posición social, los imperios...

Todo lo que nace, termina muriendo.

No hay garantía de que no mueras hoy.

Hay que empezar cuanto antes, la meditación, la contemplación o el Estudio.

Si no lo haces ahora, en la siguiente vida, puede que no tengas la oportunidad.

Lo más importante que tenemos que tener en cuenta es la Ley de la Causa y Efecto: Ley del Karma

Cada cosa precisa de causas y condiciones. Todo se dá porque se dan las causas y condiciones completas.

Todas las religiones hablan de ello de una u otra forma.

Todas enfatizan la práctica de la generosidad y la compasión. Debemos respetar todas las religiones y colaborar con ellas.

Los budistas no hablamos del Creador, todo se crea desde nuestra mente y desde nuestros actos.

Creamos nuestras acciones desde una realidad equivocada, creada en nuestra mente desde nuestro yo.

Pero si buscamos el "yo", vemos que no existe.

"Mi casa"  dice que te pertenece, pero no eres tú.

De la misma manera "mi cuerpo", "mi mente" no son el "yo", son algo que pertenecen al "yo", pero no son el "yo".

Aunque no podemos encontrarlo nos seguimos aferrando al "yo" y así aparece el "otros" de la misma manera que aparece la derecha tras aparecer la izquierda o viceversa. Una necesita de la otra.

Así, desarrollamos apego al yo y la envidia al otro. Y aparecen los tres engaños: el orgullo, la avaricia y la envidia.

Con estos engaños en nuestra mente, se crean las acciones no virtuosas y aparece el sufrimiento.

A través de mirar a nosotros y manejando nuestros sentimientos negativos es como dejaremos de sufrir. El rezo es positivo y efectivo, pero no es suficiente.

Las acciones bondadosas son lo que dan la felicidad y con ellas obtenemos salud, longevidad y éxito.

La Compasión es la práctica principal de las acciones bondadosas. Un ser sin compasión es un cadáver espritual, tiene vida física pero no espiritual.

¿Qué es la compasión?

Primero hay que practicar el amor bondadoso, como el de una madre a sus hijos. Debemos generar amor bondadoso a todos los seres, a los de esta vida, las anteriores y las futuras.

La mente, el espíritu es eterno.

La vida no tiene principio, viene desde el Sinprincipio

La vida no tiene final, a no ser que uno logre la Liberación.

Al no tener fin esta vida mientras no consigamos la Liberación, vamos a donde los vientos del Karma nos lleva y en el futuro estaremos con otros seres y por tanto hemos sido  o seremos familiares de todos los seres viviente, en una u otra vida.

Todo el mundo, incluido los enemigos, han sido los seres mas queridos en otra vida o lo serán. Y por ello, debemos amar a todos los seres.

Tenemos que hacerles felices y que tengan las condiciones para serlo, practicando el amor bondadoso y de este modo también conseguimos grandes méritos.

Los budas quieren a todos los seres como su único hijo.

Tras practicar el amor bondadoso, surge la Compasión: desear que los demás se liberen del sufrimiento y las causas del sufrimiento.

Hay tres niveles de Compasión:

  1. Compasión hacia los seres.
  2. Compasión hacia el Dharma (hacia los fenómenos) El sufrimiento y las causas del sufrimiento son los engaños. Deseas que todos los seres se liberen de los engaños.
  3. Compasión sin objeto. No existe el "yo" de los seres, está libre de las tres esferas. Debido a la Ignorancia nos aferramos al yo. Si nos abstraemos del "yo", el sufrimiento no se puede dar.
Una persona que sufre una pesadilla, sufre inútilmente. Igualmente nosotros no necesitamos sufrir, sólo tenemos que olvidarnos del "yo".

Primero hay que practicar con los familiares, amigos y conocidos, luego con los enemigos y finalmente con los desconocidos. 

Sin bodichita no eres un y. Para tener bodichita hay que practicar la compasión.

El deseo de lograr la Iluminación para conseguir liberar a los demás del sufrimiento y de las causas del sufrimiento es la bodichita y tiene un gran mérito.

Este es un Aspecto para lograr la Iluminación. El otro Aspecto es cortar con la raíz del Samsara.

Mientras te aferres al "yo", por poco que sea lo que te aferres, volverán a crecer los engaños y seguirás en la rueda de las vidas.

Con la Compasión, no crecerá el árbol del samsara, pero hay que cortarlo de raíz.

Para ello hay que emplear la Sabiduría de que no existe el "yo", no somos el "yo".

Debemos estudiar, contemplar y meditar.

Al entender esto, entenderemos la Realidad Final de todos los fenómenos: la Realidad del Dharma.

Todo lo que existe se crea desde la mente, que hace lo bueno, lo malo, experimenta la felicidad y el sufrimento, la que permanece en el samsara o se escapa mediante la Iluminación.

La Sabiduría de no existe el "yo" es la bodichita absoluta o Sunyata (Shuniata o la Vacuidad).

Bodichita y  Sunyata son igual de importantes.

Practicando Bodichita (método) y Sunyata (sabiduría) puedes lograr la Iluminación.






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